Comenzó a gestarse en los años 80 de la mano de los vecinos y vecinas del barrio. Hoy es un lugar de encuentro en plena naturaleza, que reclama la implicación del Ayuntamiento.
Cerca de las chimeneas, la mayoría ya apagadas, de aquellas fábricas que humeaban junto al barrio y, a tiro de piedra del silo de cereal que aún domina el horizonte, en Etxabakoitz fluye la vida, la vida vecinal y comunitaria para más señas. Y un ejemplo es Herri Parkea, el que se ha convertido con los años en el cuarto de estar del Grupo Urdánoz.
Cualquiera que se acerque allí podrá disfrutar con el resultado del trabajo en auzolan. Porque todo está hecho a mano, y con materiales reciclados en la mayoría de los casos. Por eso rebosa vida, porque cada elemento tiene algo de los niños que lo han pintado, del artista que dibujó las piedras y de las virtuosas manos de las tejedoras que han vestido los árboles con trajes de lana de colores. Y hay butacas de palés que lucen corona como si fueran el trono de una reina, canastas para jugar en equipo y un saco de boxeo para soltar los malos humos, triciclos y bicis para quién los coja y barbacoas esperando el humo de un asado.
Leer másHerri Parkea, el cuarto de estar de Etxabakoitz hecho en auzolan